La Casa de la Cascada (Fallingwater)

Ya van siendo casi dos décadas de Blog, sin fallar, al menos un “post” cada mes. Para celebrar mi 18.º “blogiversary”, como lo llaman, publicaré trabajos selectos, editados de mi primer blog: Dust, Sweat, and Iron. como he venido haciendo en otros momentos señalados. No solo serán sobre Arte, Pintura, Fotografía, etc… sino sobre otros temas de mi interés y así servirán para recordar y llamar la atención del “personal” al respecto. Este “throwback post” trata sobre uno de mis lugares favoritos de los Estados Unidos: La Casa de la Cascada, del gran arquitecto americano: Frank Lloyd Wright. Construida entre 1934 y 1937 como casa de vacaciones para el propietario de los grandes almacenes de Pittsburgh, Edgar J. Kaufmann, la casa es ahora un museo y patrimonio mundial de la UNESCO.

Fallingwater at Bear Run, PA: una de las pocas maravillas que no decepcionan. (Foto: Wikimedia Commons).

Fallingwater en Bear Run, PA: una de las pocas maravillas que no decepcionan.  (Foto: Wikimedia Commons).

Parece mentira, mientras en España estábamos pegándonos tiros unos a otros en una desgraciada guerra civil, 1936, entre la destrucción y la miseria propia de los tiempos, época de postguerra de la cual todavía me acuerdo muy bien, con vívidas y gráficas imágenes de pobreza, picaresca, suciedad, malos olores, fealdad en tantas cosas y contrastes de gran lujo en las casas de las gentes de poder y de dinero.

Parece mentira, digo, que por entonces en estos Estados Unidos, un hombre como Kauffman, dueño de un gran almacén, pero al fin y al cabo provinciano, tuviera el arranque, y el dinero, de encargar a un arquitecto singular (aunque su hijo fuera quien le “malmetiera” con dicho arquitecto) una casa de campo en el corazón de un bosque y en medio de la nada. Le diera carta blanca para crear uno de los hitos de la arquitectura moderna.

Y así fue.

Aun hoy, cuando la ves, parece una casa recién construida o como mucho de veinte años atrás y no de hace noventa años como en realidad es. Este arquitecto con tal visión de anticipación y tal capacidad de revolución estética era nada menos que Frank Lloyd Wright, cuyas ideas y aportaciones al diseño de la moderna habitabilidad fueron, y aún perduran, lo mejor del siglo XX, o de lo mejor.

Retrato de Frank Lloyd Wright, John Donat, 1956. Image: RIBA Collections.

Retrato de Frank Lloyd Wright, John Donat, 1956. Image: RIBA Collections.

Uno no tiene más que darse una vuelta por Pozuelo, Majadahonda, y otros alrededores de Madrid para darse cuenta de la enorme influencia de Lloyd Wright en la arquitectura mundial. Después de constatar esto, nos viene a la mente: Cuarenta mil de esas casas podían haber salido de los dibujos de su estudio y desde luego una grandísima cantidad de arquitectos de la segunda mitad del siglo anterior han bebido las aguas de esta cascada, a tan solo una hora de Pittsburgh y en el medio de un bosque maravilloso, hoy día parque natural de conservación y protección estatal.

Se dice que una de las pocas maravillas que no decepcionan, cuando se ven en realidad, es el Gran Cañón del Colorado. Es cierto. Pero yo añadiría por mi cuenta (y riesgo) la Casa de la Cascada a esta corta relación de monumentos de la humanidad.

Pittsburgh, PA, Octubre del 2007. Re-edicion: luisjimenezridruejo.com, 31 de Enero del 2025.

 

Preguntas/Questions?   Contact